lunes, 28 de mayo de 2007

Tener un 0 Km

Suele ser un deseo de muchos, a algunos les cuesta mas que a otros. Es mas, se de gente que ha llegado a hacer las cosas mas insólitas para cumplir con su anhelo. De mi parte, entiendo que tiene que ser una decisión madurada, analizada, ponderada. Si bien no debería ser un imperativo tener uno, muchas personas lo vivencian con esa intensidad, con tal grado de exigencia que de no llegar al mismo sienten que en su vida hay una asignatura pendiente, que no han sabido/podido llegar a esa meta. Otros en cambio viven el tema mucho mas relajadamente, suelen decir que en la vida hay otros intereses que no se pude ser tan reduccionista al extremo de poner en este tema el epicentro de nuestras vidas. Pero si bien es cierto que una cosa es las ganas de tenerlo y otra es efectivamente llegar al mismo, la cosa no termina allí; por que una vez que se lo tiene la cosa parece que recién empieza. Hay que realizar los controles periódicos, los chequeos del caso, etc. Es mas, hay algunos que se suponía que tanto lo querían y después resulta que cero cuidado, y entonces uno dice pero tanto que jodieron con que querían uno y al final no le dan bola; y después están los que se encuentran en el otro extremo que lo único que existe es su nueva adquisición, es lógico que al principio el tema sea central, pero no puede ser que con el paso del tiempo de lo único que puedan hablar sea de esto. En fin hay de todo en la viña del señor. Ah, me olvidaba comentarles que yo tengo uno; desde hace tres meses y se llama Ignacio.

No hay comentarios: